Mar adentro
Cuando tenía 18 años, Ramón Sampedro saltó de un peñasco en el momento del resaca y chocó violentamente el fondo. Este accidente lo hizo tetraplégico. Después de 28 años pasados por la cama, sin poder mover las piernas ni los brazos, Ramón quería morir. Sin embargo, la ley española no autorizaba y siempre no autorices la eutanasia activa. Con el fin de irse en la dignidad sin forzar a sus allegados o médicos que cometen un acto criminal, Ramón comprometió a Julia, una abogada, y empezó una batalla jurídica que pretende hacer evolucionar la ley. Julia tomó a pecho este combate, porque padecía de una enfermedad degenerativa que la llevará tarde o temprano a la parálisis. Ramón debía también convencer a sus allegados, que le rodeaban de toda su afección y tomaban cuidado de él desde el accidente. Al final, con la ayuda de Manuela (una amiga), Ramón consiguió poner fin a sus días, delante de una cámara, para que todo el mundo sabería que es de manera totalmente consciente y considerada aceptó suicidarse.
En esta pelicula realizada por Amenabar, todos los actores se transforman literalmente en su personaje. Durante la pelicula, no podemos abstenernos de creer que el actor de Ramon es realmente tetraplégico, mientras que no es el caso. Por consiguiente, este papel debe ser muy difícil, porque consiste en hacer caso omiso de su cuerpo.
Para concluir, Mar Adentro es una película magnífica, luminosa, con muchos momentos de humor e imágenes de sorprendente belleza. Es a la vez muy triste pero tan realista...