Direccion de produccion y operaciones
Hasta finales de los 50´ y principios de los 60´ no surgen estudios específicos sobre la dirección de operaciones como algo diferente a la ingeniería industrial o a la investigación operativa.
La dirección de operaciones es reconocida en la actualidad como un área funcional de las organizaciones ya sean con o sin ánimo de lucro, públicas o privadas, de fabricación o de servicios.
A finales del siglo XVIII la agricultura era la actividad fundamental y la fabricación no existía. Este enfoque empieza a cambiar a inicios del siglo XIX como consecuencia del invento de la máquina de vapor que aporta una importante fuente de energía para la fabricación. A partir de este momento aparecen grandes instalaciones fabriles pero todavía se sigue considerando que la fabricación es más un arte que una ciencia. El cambio de visión se inicia con Adam Smith, que considera que la subdivisión y especialización en el trabajo arroja beneficios económicos. De ahí que proponga que los trabajadores realicen tareas especializadas para aumentar la eficiencia e incrementar las habilidades de los mismos.
A principios del siglo XX surge la organización científica del trabajo a manos de Taylor, que dice que la utilización eficaz del tiempo de trabajo es fundamental, y llega a la conclusión de que la pérdida de esfuerzo humano es perfectamente evitable si la dirección estudia el trabajo de un modo científico; es decir, eligiendo el hombre adecuado para cada trabajo específico y desarrollando el mejor método para llevarlo a cabo. Taylor lleva a la práctica su sistema y consigue bajar los costes de producción.
Un colaborador importante de Taylor fue Gantt, que centra su atención en crear un ambiente que le permita obtener una mayor colaboración de los trabajadores. Henry Gantt desarrolla el denominado diagrama o gráfica Gantt que es